Introducción
En el año 2030, la Ciudad de Buenos Aires se encontraba en la cúspide de una revolución tecnológica sin precedentes. La implementación de armaduras cibernéticas para los Cyber-Guardias había aumentado significativamente la seguridad y eficiencia en la lucha contra el crimen. Sin embargo, con la creciente amenaza de organizaciones criminales internacionales y desastres naturales, el gobierno de Buenos Aires decidió dar un paso más allá: la creación de gigantescos mechas de defensa. Así nació el Proyecto Mecha.
Orígenes del Proyecto
El Proyecto Mecha fue concebido por un grupo de científicos, ingenieros y militares de élite, liderados por el brillante Dr. Eduardo Salazar, un pionero en robótica y cibernética. El objetivo era crear una serie de robots gigantes, cada uno con habilidades especializadas, que pudieran proteger la ciudad en situaciones extremas. La idea era que estos mechas pudieran operar en diversos entornos, desde la profundidad del océano hasta el cielo, y enfrentar cualquier amenaza con una fuerza abrumadora.
Desarrollo y Construcción
El desarrollo de los mechas fue un esfuerzo monumental que requirió años de investigación, pruebas y colaboración internacional. Los diseños de los mechas se inspiraron en criaturas poderosas de la naturaleza, otorgándoles habilidades únicas que los hacían indispensables para la defensa de la ciudad.
1. Dramedron (Dragón de Fuego):
- Forma: Dragón rojo humanoide
- Piloto: Ignacio "Nacho" Díaz, un valiente bombero y experto en rescates.
- Características: Lanzallamas, vuelo, cola afilada y resistencia al calor.
- Forma: Tiburón azul humanoide
- Piloto: Valeria "Vale" Mendoza, una bióloga marina y buceadora profesional.
- Características: Nado rápido, mandíbulas de acero, camuflaje acuático y sensores de sonar.